En la era de la información y las comunicaciones, cualquier persona dispone de herramientas infinitas para obtener conocimientos sobre todo lo que le interese y desde cualquier lugar y en cualquier momento. Esta circunstancia ha provocado la transformación de los mensajes publicitarios tradicionales, cediendo terreno a sistemas nada intrusivos basados en la metodología Inbound Marketing. Valiéndose de ella, la publicidad online es canalizada sutilmente hacia su target o público objetivo. Inbound marketing con PPC
Cada vez más los usuarios optan por bloquear en sus navegadores aquella publicidad que consideran invasiva, lo que supone que el producto o servicio que ofrece una empresa no llegue a impactar en una parte importante de su público potencial. En el 2015, el uso de adblockers aumentó un 41% respecto al 2014 y la tendencia va en aumento.
En este escenario, lo más importante es dibujar el perfil de nuestro cliente potencial y atraer su atención hacia nuestra página web. Para ello es imprescindible que creemos contenidos altamente informativos y de gran calidad. Para acelerar su difusión puede resultar muy interesante lanzar campañas de PPC concebidas como acciones para atraer más tráfico en la fase inicial de nuestra campaña de inbound marketing y/o orientadas a posicionar (eso sí, solo mientras esté activa la campaña) una web en los motores de búsqueda, particularmente en Google.
Pero, ¿tenemos claro qué es PPC? ¿Y SEM?
Aunque pueda parecer lo mismo, no lo es. Óscar Abad, consultor PPC de We Are Marketing, diferencia en su artículo ‘Diferencias entre SEO, SEM y PPC’ entre estos términos, de una manera muy gráfica: SEO (Search Engine Optimization): es el posicionamiento y la optimización en los motores de búsqueda con la finalidad de mejorar la visibilidad de un sitio web en los resultados orgánicos de los diferentes buscadores. Se trata de un posicionamiento natural, no de pago.
SEM (Search Engine Marketing): se trata del pago por la obtención de lugares que otorgan visibilidad y tráfico a tu web. Engloba cualquier acción de marketing que se haga en un buscador, tanto SEO como PPC.
PPC (Pay-Per-Click): es el modelo de publicidad en Internet en el que interviene el site de un ofertante de un espacio publicitario y el site de un demandante que necesita dar a conocer sus productos o servicios en la red.
En resumen, el SEM engloba tanto el PPC como el SEO, y no solo el PPC, como hasta hace muy poco se pensaba (y como algunos todavía creen). En el artículo ‘Inmersión en SEM y Turismo’ puedes profundizar un poco más en la necesidad de la especialización en SEM en las campañas de marketing online.
Inbound Marketing y PPC
Las metodologías Inbound tienen una dinámica de resultados exponencial, empezando a dar los primeros resultados a medio plazo. Dependiendo de diversos factores como la autoridad de nuestra página web, la relevancia que se vaya dando a nuestros contenidos o los inbound links que vayamos consiguiendo – entre otros – cada vez iremos consiguiendo mayor visibilidad en los buscadores, lo que consecuentemente provocará mayor tráfico de visitas a nuestro site y que el lead flow (captación de leads) se acelere.
Las campañas de pago por clic adquieren un buen encaje dentro de la metodología Inbound Marketing sobretodo en los compases iniciales. Está demostrada su capacidad de conferir un potente impulso a corto plazo a la divulgación de nuestros contenidos y a la captación de leads para nuestro proyecto.
Las campañas de PPC, utilizando diferentes plataformas entre las existentes, nos pueden ayudar a:
Acelerar los resultados.
Conseguir un mayor volumen de leads cualificados afines a nuestro producto o servicio.
Segmentar mejor y ofrecer mejores anuncios y más personalizados teniendo en cuenta el lifecycle stage dentro del marketing funnel.
Conocer las palabras que mejor convierten para luego apostar por ellas en nuestra estrategia Inbound Marketing.
Aumentar el reconocimiento de marca
Captar más tráfico cualificado a nuestra página es uno de los objetivos de una campaña PPC, que se convierte así en una nueva plataforma para encontrar a nuestros buyer persona (siempre a través de una oferta de contenido de valor): el lead que adquirimos a través de este sistema es pagado aunque la forma de educarlo, guiarlo y nutrirlo a través del buyer journey es idéntico al que sigue un lead que llega a nosotros a través de un medio orgánico o referido.
Ejemplo:
La mejora y perfeccionamiento de las redes sociales ha llevado a que, a través de éstas, las empresas puedan realizar campañas de pago y no se vean limitadas tan solo a Google Adwords. Podemos aprovechar Twitter Ads, Facebook Ads o Linkedin Ads para:
Alcanzar más usuarios (no todos los usuarios usan las mismas rrss).
Máxima segmentación del público al que nos dirigimos.
Distribución de nuestros canales de adquisición de leads.
Ajustar nuestro presupuesto (además, no exige una inversión elevada).
Controlar el rendimiento en tiempo real.
Optimizar nuestras campañas.
Según Infront, el 90% de los clics en la primera página de resultados de búsqueda de Google se realizan en los enlaces orgánicos y el otro 10% se destina a anuncios pagados. Además, sólo el 8,5% del tráfico web hace clic más allá de la primera página. Pero estas cifras no deben interpretarse como la elocuencia que sus dimensiones parece indicar: los anuncios pagados son una herramienta valiosísima para incrementar de forma muy notable la captación de leads en la fase del funnel de ventas (Tofu – Mofu – Bofu) que necesitemos potenciar en cada momento, algo que resulta decisivo en la consecución del objetivo último: la optimización de la tasa de conversiones.
KPI’s que nos ayudarán a medir el éxito de nuestras campañas de Inbound Marketing:
Ingreso por Lead: cuánto dinero nos genera un lead.
Coste por Lead: cuánto hemos invertido en obtener un lead.
Lifetime Valu